Te Cortaría en Mil Pedazos : relatos, historias propias. Resucitandote en cada historia. | Weblog de Cristian Sena

—Creo que todavía no existe otro amor que el amor a primera vista.
—¿Qué es el amor a primera vista? —pregunto Chivi, estaba sentada junto a mí apoyados en nuestro paredón, digo nuestro por que ahí están escritos con aerosol nuestros nombres.
—El amor a primera vista es cuando vez a alguien y te enamoras. Cuando dejan de existir las cosas que están a su alrededor, y el ruido de estos autos que pasan por acá el costado, ya no se escuchan. —respondí.
—¿Y como te das cuenta que estas enamorado? —insistió Chivi.
—Eso es más complicado, a diferencia del amor a primera vista, por que eso les pasa a la mayoría de las personas, enamorarse en el acto de alguien, sin necesidad de escucharlo hablar. Yo me doy cuenta que estoy enamorado de alguien, cuando no dejo de pensar un segundo en esa persona. Cuando no necesito hablar para demostrar lo que siento. Cuando la paso bien, cuando me río todo el día. Cuando no puedo dormir a la noche.
—Entonces ¿Es lindo? —dijo chivi.
—Sí, es hermoso.
—¿Y a nosotros nos puede pasar, la gente de la calle se enamora?
—Rara vez, si bien todos se enamoran es más importante saber que vamos a comer, donde vamos a dormir. No tenemos mucho tiempo para el amor.
—Bueno, vamos que te muestro la casa. —me dijo riéndose.
Chivi es una princesita, de apenas 17 años, ella vive en la calle al igual que yo. La calle nos unió, yo tengo casi 18 años, y jamás en mi vida me enamore de alguien.
Caminamos unas diez cuadras hasta una esquina en donde había una casa enorme, abandonada.
—¿Ves?, esa es la que yo te digo —y señaló la casa.
—¿Pero esa no esta ocupada? —pregunté.
—Sí, pero son los Rojas, solo son tres, el matrimonio, y un hijito discapacitado. No creo que tengan problemas si les decimos que nos quedamos con ellos unos meses.
—¿Te parece? —le dije con muchas dudas al respecto.
—Sí, vamos —me agarro de la mano y empezó a caminar hacia la casa. Cuando ella me agarra la mano siento una seguridad increíble, así estemos saltando a un precipicio, su mano me da tranquilidad. Somos amigos, creo que eso es la amistad, ir de la mano a donde sea.
Cruzamos la calle y ya estaba frente a ese caserón arruinado por la humedad. Comenzó a golpear sus manos. Se abrió la puerta y salio un nene discapacitado de nose 8 o 9 años, solamente decía “Mamá, Papá”. Fue inútil intentar preguntarle si estaban los padres.
—Chivi, ¿Y si nos vamos para Quilmes? —pregunté con entusiasmo.
—¿Te parece?, pero allá no conocemos a nadie, acá mal o bien, la gente algo para comer nos da, este es nuestro barrio. Nose la verdad. —Dijo ella.
—No, allá esta mi abuela, revise cartas de mi viejo, y hay una dirección que es donde él vivía de joven, ahí debe vivir mi abuela. Probamos, dale, vamos para allá. —y la abracé por la cintura.
Caminamos hasta constitución apurados, ya eran las cinco y media de la tarde. Hasta Quilmes tendríamos aproximadamente media hora mas.
Subimos al tren y comenzamos a ver como el mundo se detiene y nosotros comenzamos a movernos. Abrazados por el frío que tensa todos los músculos, y en el ultimo vagón, nos dirigíamos a buscar una efímera solución.
—Yo nose para que vine al mundo. —suspiro Chivi, con un poco de resignación en sus labios.
—¿Cómo que no sabes? —pregunte yo.
—Claro, nose que hago acá. Mi vida es un completo fiasco. Ni siquiera enamorada, ni siquiera tengo para comer. No me puedo comprar ropa, no tengo amigos, no tengo familia, vivo en la calle. No tengo nada. ¿Para eso vine? —dijo Chivi con los ojos llenos de lagrimas. Trague saliva y como siempre trate de levantarle el animo, aunque esta vez, me iba a costar mas de lo habitual, ya que al oír sus palabras no pude contener una lagrima.
—Bueno, si vas a pensar así, yo tampoco tengo nada. Solo a vos y eso no es poco para mí. Al contrario, yo nose que haría si no estas vos conmigo. Y si de fracasos se trata, yo tengo honores en esa profesión. Pero mi suerte cambio y quien te dice que la tuya no pueda cambiar. Si te pones a pensar te darás cuenta que tenes algo que mucha gente no tiene y es mas valorable que la plata. Tenes juventud, sos hermosa, y por si eso fuera poco, sos libre.
¿O vos pensas que en tu casa, estabas mejor que acá?, con un viejo borracho que no hacia otra cosa más que abusarse de vos. O te crees que yo estaba mejor en mi casa, con mi viejo que cagaba a palos a mi vieja, y cuando ella se fue seguí yo en la lista. No tenes que pensar que no tenes nada, al contrario tenes muchas cosas, pero es como todo, algunas cosas las vas a ir descubriendo sobre la marcha.
—¿Esas cosas que decís siempre, cuando yo me pongo mal, es por que estas enamorado de mi a primera vista? —preguntó Chivi. No pude contener la risa, tiene una chispa muy particular.
—Ehhh, la verdad, ¿Vos queres saber la verdad, verdad? —respondí.
—Si, quiero saber la verdad, verdad —me dijo sin despegar sus ojos de mí.
—Bueno, cerra los ojos. ¿Escuchas el ruido del tren? —pregunté.
—Sí —respondió.
—Bueno, no los habrás, no me hagas trampa.
Acerque mis labios y comencé a besarla, no pude resistir mas, al verla así con sus ojos todos irritados después de lagrimear, la sentí tan indefensa y mis ganas aumentaron, no pude frenarme aunque dude en hacerlo. Aproximadamente fueron quince o veinte segundos, después me empujo para atrás.
—¿Qué haces estúpido? —dijo Chivi, desentendida.
—¿Escuchaste el ruido del tren, mientras te besaba? —pregunté.
—No —respondió.
—Bueno, mi amor es aun mas grande que el amor a primera vista. Estoy enamorado de vos. —le dije sosteniendo sus manos.
—¿De enserio te gusto? —insistió chivi.
—Sí, sos la chica mas linda que conocí. Es más, cuando lleguemos a Quilmes, te voy a dar un regalo.
—¿Y yo gusto de vos? —me preguntó y por un segundo, sentí que mi mundo se caía a pedazos. Que reafirmaba algo que me negaba a muerte, que realmente no tenia nada.
—Eso no lo sé Chivi, de eso te vas a dar cuenta sola.
—A ver, cerra tus ojos. —dijo Chivi y se abalanzó sobre mi, asiendo que recueste mi cuerpo a lo largo del asiento de cuerina marrón.
Y toda la gente que estaba alrededor, al igual que el sonido del tren, desaparecieron.

5 Comentarios:

# Anónimo dijo...

Qué buen blog. No soy de comentar en estos lugares, sólo en los que me gustan demasiado. Leí varios de tus escritos, son muy buenos. Te felicito eh! este me gustó mucho en particular, por eso comento acá, que se yo... además es lo lógico, que comente la última actualización.

Bueno, eso.

# Freddy dijo...

Muy bueno como siempre.

¿Sabes?, es la historia de todos los enamorados, tengan todo o no tengan nada, el crear castillos en el aire es una condición propia de ese estado. Y eso no lo cambio por nada.

Exitos.

# SOL dijo...

awww que modo simple de explicar el complejo amor , dem nice

besos cris (dijo la igualada)

besitos desde el sol

# nabinguser dijo...

corrección: *haciendo. del verbo hacer.
Creo que esta es la historia q más me gusto... aaah....me haces suspiraR! :P

# Cristian Sena dijo...

rro: Acá no hay lógica, en este blog, se dejo de usar hace mucho tiempo, comente donde quiera, yo personalmente leo todos los comentarios y trato de responderlos. Gracias por la buena onda y por su tiempo. Un saludo.

freddy: Muchas gracias por el comentario, sabias palabras. Un saludo, que todo este muy bien.

sol: ¡Gracias sol!, por todo, por los comentarios y por la buena onda, un placer leerla. Un saludo.

nabinguser: Gracias por el comentario, me alegro que le haya gustado, un saludo, suspire tranquilo.

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